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Un intérprete instantáneo en tu smartphone. ¿Un nuevo paso hacia la desaparición del estudio de otros idiomas?

En este post no voy a tratar el tema del bilingüismo (o trilingüismos, en algunos casos) en los centros escolares. Algún día se tendrá que hablar sobre los resultados en la implementación en las escuelas, sus luces y (muchas) sombras.

Hoy me centraré en una nueva compañera que tenemos en nuestros smartphones. Puede que no te hayas enterado, es una noticia que ha pasado más o menos desapercibida y, desde mi punto de vista, es bastante relevante en cuanto a sus implicaciones en el futuro.

En el caso de que tengas Android, el asistente de Google ha incorporado de manera automática el modo intérprete en tiempo real, sin ninguna instalación adicional, solo necesitas tener conexión a internet. En el caso de los iPhone tendrás que descargarte la app de Google Assistant. Hay que aclarar que en muchas ocasiones se utiliza el término intérprete y traductor indistintamente y no lo es. Un traductor lo hace en un medio escrito, mientras el intérprete lo hace de manera oral. Hasta hace poco esta función de interpretación simultanea se encontraba solo en sus periféricos de Google Home y Google Nest. Esto era útil si trabajas en una oficina o en casa, ya que llevártelo encima era un poco absurdo.

Ahora solo necesitas sacar el móvil y decir “Ok Google, ayúdame a hablar en alemán”, u “ok Google, quiero que seas mi intérprete” te pregunta en qué idioma y listo. También aparece en la pantalla todo lo que decimos. En total, contamos con 44 idiomas diferentes.

Ahora solo necesitas conectar y compartir unos auriculares bluetooth, y ya tenéis un intérprete en tiempo real particular.

Funciona como una conversación y es capaz de reconocer las distintas variaciones lingüísticas como, por ejemplo, inglés de Reino Unido e inglés de Estados Unidos.

Para muchas personas será un pasatiempo más, y echar unas risas con la familia en las sobremesas, pero estos pequeños pasos a un acercamiento de habilidades que requería años de estudios en cuestión de segundos tienen unas implicaciones que, como mínimo, son interesantes.

Ya había periféricos que hacían esta función, pero era necesario desembolsar dinero para llegar a ellos, en cambio ¿quién no tiene hoy día un smartphone en su bolsillo?

Hasta ahora el estudio de idiomas se centraba en la necesidad (laboral y/o personal), o por el propio placer de estudiar y aprender algo que te habría un sinfín de posibilidades. La traducción instantánea escrita está más que implementada, solo dando un botón tienes un texto en el idioma que quieras, obviamente con sus más que conocidos fallos, pero la interpretación instantánea cuenta con unos hándicaps difíciles de superar.

Con estos pequeños avances poco a poco, las personas que se dediquen a las traducciones e interpretaciones, pueden llegar a ser cada vez menos valorados. Por supuesto, siempre serán necesarios profesionales que supervisen o cuando sea necesario contar con la privacidad que nos quita la tecnología tan alegremente.

La historia nos ha enseñado que siempre buscamos el camino más corto y fácil, y si además reduce gastos, mejor que mejor. Ante la disyuntiva de elegir estudiar durante años otros idiomas que no sea el tuyo nativo o el sacar el móvil y darle a un botón, ¿qué creéis que elegirán las personas?


Salvador Fdez.

Cofundador de EducatPals - PSI del Departamento de Didáctica y Organización Escolar (UMA) - Miembro del Grupo de Investigación HUM365: Formación, Orientación, Empleabilidad, Emprendimiento, Inclusión e Innovación (FOREMPIN) - Diplomado en Magisterio de Educación Especial- UMA - Graduado en Educación Primaria con Mención en Escuela Inclusiva y Atención a la Diversidad -UMA - Máster en Políticas y Prácticas de Innovación Educativa- UMA

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